– Vaso o plato con agua.
– Aceite de oliva.
– Un mechón de pelo de la persona a «mirar» o diagnosticar.
– Foto.
– Vela blanca.
Necesaria una foto y un mechón de pelo de la persona a limpiar. En su defecto, si no tenemos foto o mechón o ninguna de las dos cosas, apuntar el nombre de la persona en un papel y la fecha de nacimiento. Se puede realizar con la persona afectada presente, en este caso no hacen falta ni la foto ni el papel con el nombre. Durante el tiempo que dure el ritual, el afectado debe mantenerse en silencio para dejar al oficiante trabajar. No debe hablarle.
Este ritual se realiza igual que el anterior, estando de pie, frente a la mesa en la cual tendremos el vaso con el agua y el aceite ya preparado, junto con la foto de la persona. Si el afectado está presente debe mantenerse en pie frente al oficiante.
1º Mojar el mechón de pelo o, si no se dispone de él, mojar el dedo índice de la mano derecha en el aceite, el cual tendremos exclusivamente para este ritual.
2º Dejar caer 3 gotas de aceite sobre el agua. Rezar 3 Padre Nuestro en cada gota.
3º Observar hacia dónde va y cómo se comporta el aceite. Si se abre, expande o hunde indica que hay Mal de Ojo. Si flota agrupado formando una masa o gota compacta no lo hay.
4º Al finalizar encender una vela blanca mientras se vuelve a rezar nuevamente otro Padre Nuestro. Aunque no se haya cortado el Mal de ojo se debe encender la vela y decir la oración, y repetir el ritual durante varios días hasta conseguir eliminarlo.