-Antes y durante el proceso de encender la vela debes evitar pensamientos negativos de cualquier tipo. Es muy importante que enfoques y centres tu energía mental en lo que estás pidiendo.
-Las velas deben colocarse en un lugar alejado de corrientes de aire y del paso de otras personas.
-No realices ningún ritual con velas en compañía de otras personas. Sus energías podrían interferir en tu petición.
-Las velas deben encenderse con cerillas de madera siempre. Se escribe o se graba en ellas con palillos de madera también, a no ser que el ritual en concreto te diga que lo debes hacer con algún objeto metálico o de otro tipo.
-La mesa donde enciendas las velas debe estar especialmente reservada para este fin. Si es posible elije para tu altar una mesa, de madera también, ovalada o redonda.
-Una vela que se apaga sola indica que existen fuerzas o energías que obstaculizan o bloquean tu petición o que es voluntad divina que no sigas adelante con el ritual. Sea por el motivo que sea nunca vuelvas a encender la misma vela.
-Para apagarlas, en caso de que el ritual lo indique pues por norma general hay que dejar que se consuman del todo, puedes hacerlo con un vaso invertido sobre la llama. Nunca se debe soplar para apagarlas.
-Una vez que se han encendido no deben ser trasladadas ni cambiadas de lugar. Salvo la excepción de la vela negra que se va pasando por las estancias de toda la casa, en ciertos trabajos de limpiezas energéticas.
-Los nombres en las velas se escriben de arriba hacia abajo (de la mecha hacia la base) cuando es para atraer y a la inversa cuando es para rechazar (de la base hacia la mecha).
-Para darle mayor fuerza a un ritual con velas tienes que tener en cuenta las fases de la Luna:
· En cuarto creciente todo acelera su proceso de crecimiento, todo aumenta. Para rituales relacionados con progreso, crecimiento o prosperidad debes comenzar el ritual el primer día en que la Luna se encuentre en esta fase, la de cuarto creciente.
· En cuarto menguante todo disminuye.